Activos privados
5 min de lectura 9 may. 24
La gran mayoría de las compañías de la Unión Europea son pymes1. Esto significa que el crecimiento económico sostenible y a largo plazo en la región depende del respaldo a estas empresas, sobre todo ahora que muchas de ellas están optando por aplazar su salida a bolsa y permanecer más tiempo en manos privadas2.
A medida que continúa el repliegue del préstamo bancario en Europa debido a requisitos regulatorios crecientes3, creemos que el ecosistema corporativo ofrece un entorno ideal para la entrada de prestamistas privados que ayuden a propulsar a la economía de la región. En nuestra opinión, la deuda no cotizada puede desempeñar un papel esencial financiando a las pymes en todas las fases de su ciclo de crecimiento, pero ¿cómo pueden los inversores acceder a este prometedor entorno?
En un intento de cerrar la brecha de financiación pública para empresas privadas, la UE introdujo el Fondo de Inversión a Largo Plazo Europeo (ELTIF, por sus siglas inglesas) en 2015 para animar la inversión en la economía real europea. El objetivo era canalizar capital hacia áreas esenciales como la infraestructura, el inmobiliario y la inversión sostenible, impulsando al mismo tiempo la democratización de los activos privados para el inversor particular4.
En el pasado, a muchos inversores particulares europeos les costaba acceder a las inversiones no cotizadas y a largo plazo que los ELTIF suelen tener en cartera. Históricamente, los mercados privados (donde es más probable que la innovación proceda de pequeñas empresas con nuevas ideas o tecnologías) han sido el dominio de inversores institucionales como fondos de pensiones, fondos universitarios y fondos soberanos.
La iliquidez inherente a muchos segmentos de las clases de activos privadas ha sido por lo general una barrera de entrada, ya que las estructuras de fondos ilíquidas y de capital fijo no siempre cumplirán los requisitos regulatorios o de cartera de ciertos tipos de inversores. Por otra parte, las gestoras exigen compromisos de capital mínimos a menudo muy elevados para invertir en activos ilíquidos de deuda privada, lo cual también puede afectar a la diversificación de cartera de los inversores más pequeños.
La introducción de marcos regulados como ELTIF 2.0 está impulsando la creación de un mayor número de vehículos semilíquidos capaces de invertir en todo el espectro de activos de los mercados privados. Esta constante evolución del universo de alternativos ha abierto las puertas a una base de inversores más amplia, permitiéndoles acceder de manera temprana a las oportunidades potenciales que ofrece el segmento.
El marco original ELTIF 1.0 contenía definiciones y restricciones estrictas sobre el tipo de inversiones que podían realizar estos vehículos. Estas limitaciones se diseñaron para asegurar una diversificación adecuada en las carteras de los inversores, pero se consideraron demasiado prescriptivas, lo cual mermó su potencial de crecimiento y condujo a una aceptación inicial más lenta. Sin embargo, algunos de estos fondos se han remodelado y relajado, permitiendo un abanico más amplio de estrategias de inversión y una mayor participación del inversor.
«Las ventajas principales del marco siguen inalteradas: acceso regulado a activos privados para una base de inversores más amplia, y un pasaporte de comercialización que permite un acceso eficiente en toda la región, fomentando tanto la diversificación de carteras como eficiencia de costes», afirma Aramide Ogunlana, Directora de crédito no cotizado en M&G Investments.
A través del marco ELTIF, remodelado con la introducción de ELTIF 2.0 en enero, los inversores particulares pueden obtener exposición a estas oportunidades de inversión típicamente ilíquidas y a largo plazo, en nuestra opinión capaces de ofrecer rentabilidades atractivas a lo largo del tiempo. Una de las mejoras clave fue la eliminación del umbral de inversión mínima de 10.000 EUR, pero los clientes y firmas de inversión deben equilibrar acceso y apetito con capacidad de despliegue en sus respectivos mercados. El nuevo marco también permite a la gestora coinvertir junto a sus clientes, y creemos que este alineamiento es una herramienta clave para proteger los intereses del inversor, en particular para inversiones ilíquidas a largo plazo.
«La modificación que reduce la inversión mínima en activos elegibles del 70% al 55% significa que ahora los activos cotizados pueden representar hasta un 45% de la cartera de un ELTIF», explica Ogunlana. «Si bien aplaudimos una definición más amplia, el descenso de la asignación mínima en activos elegibles obliga a los inversores a llevar a cabo su diligencia debida para asegurarse de seleccionar el fondo adecuado y disfrutar de las ventajas de diversificación de los activos privados.»
Otro cambio es la definición menos restrictiva de lo que constituye un «activo real». Bajo el marco original, los activos reales se definían como aquellos con un valor mínimo de 10 millones de euros. En cambio, ELTIF 2.0 define los activos elegibles como aquellos «con valor intrínseco debido a su constitución y propiedades»5, lo cual amplía de manera considerable el alcance de las inversiones de ELTIF.
El marco ELTIF 2.0 proporciona una estructura regulada que permite a los inversores acceder a oportunidades potenciales en el amplio espectro del crédito no cotizado. Invirtiendo en esta clase de activos a través de ELTIF, un mayor abanico de inversores podrían beneficiarse de sus ventajas de diversificación, niveles atractivos de rentabilidad ajustada al riesgo y exposición a las necesidades de financiación de la economía real.
Bajo el marco mejorado, una estructura de fondo semilíquida con un enfoque multi-crédito puede brindar un acceso sencillo a la amplia variedad de opciones del universo de deuda no cotizada, desde préstamo corporativo privado hasta crédito para activos reales. Estos segmentos tienen motores de rentabilidad y riesgos subyacentes muy distintos, lo cual permite una exposición flexible a activos generadores de renta alternativos y diferenciados en todo el ciclo. Ello aporta ventajas potenciales para equilibrar riesgo y rentabilidad frente a la asignación de activos tradicional, y así ayudar a superar posibles episodios de volatilidad en los mercados.
Es importante añadir que las inversiones en crédito no cotizado conllevan otros riesgos inherentes como de crédito, de liquidez y de mercado, que los inversores deberán considerar cuidadosamente antes de tomar decisión alguna.
Sin embargo, las gestoras con experiencia en el mercado, como M&G Investments, pueden sacar partido a sus capacidades y escala para navegar el mundo a menudo complejo del crédito no cotizado europeo, ajustando de manera flexible sus asignaciones con objeto de capturar valor en distintas condiciones de mercado. Las empresas cambian de manera dinámica sus fuentes de financiación, cuyas fronteras se difuminan con la convergencia entre los segmentos líquidos e ilíquidos del mercado privado de crédito. Creemos que las gestoras con el conjunto de herramientas adecuado son esenciales para aprovechar esta tendencia y ayudar a los inversores a cumplir sus objetivos.
Por ejemplo, la deuda corporativa no cotizada líquida incluye préstamos sindicados de gran tamaño capaces de ofrecer implementación rápida, diversidad de cartera y liquidez, además de la protección potencial frente a caídas que ofrece su seguridad y prelación en la estructura de capital de la compañía, así como tipos de interés eminentemente flotantes. Dicho esto, algunas de las mejores oportunidades en activos privados se hallan en el extremo de mayor rentabilidad del espectro, en las áreas ilíquidas del mercado como por ejemplo el préstamo directo o las compañías de capitalización grande o mediana, cuyo riesgo suele verse mal estimado. Pese a su menor liquidez, creemos que la inclusión de cláusulas de mantenimiento sólidas (en su mayoría ausentes en los mercados cotizados) puede equilibrar el riesgo del inversor sin dejar de ofrecerle una prima de rentabilidad.
«Si bien es indiscutible que Estados Unidos es el mercado de mayor tamaño, se trata de una sola jurisdicción gobernada en su mayor parte por la misma regulación, en la que la elevada competencia ha conducido a una relajación de los criterios de concesión de crédito para obtener operaciones», explica Michael George, gestor en M&G Investments.
«Además, el potencial de crecimiento es más aparente en Europa», añade. «Los bancos ya se han retirado en gran medida en Estados Unidos, mientras que en Europa todavía existe un recorrido significativo. También vemos más riesgos de suceso extremo en Estados Unidos, más exposición al segmento CCC, fundamentales menos sólidos y una rentabilidad aportada inferior a la de Europa en múltiples periodos, incluido 2023.»
Aunque la Unión Europea no cuenta con sociedades de desarrollo comercial (BDC, un instrumento habitual entre los inversores sofisticados estadounidenses para obtener exposición al crédito no cotizado), los organismos reguladores se han dado cuenta de la brecha económica creada por la restricción del acceso a los mercados privados para empresas y consumidores, y la introducción de regímenes de fondos como ELTIF está ayudando a Europa a cerrarla.
Con las empresas optando todavía por aplazar su salida a bolsa y permanecer más tiempo en manos privadas, obtener acceso al crédito no cotizado europeo no solo brinda exposición a las ventajas de rentabilidad potenciales de la clase de activos, sino que también permite a los inversores jugar un papel esencial financiando el crecimiento económico en la Unión Europea, y al mismo tiempo sacar partido a algunas de las innovaciones capaces de dar forma a la sociedad en el futuro.
Tenga en cuenta que los ELTIFs son de naturaleza ilíquida al invertir con un horizonte a largo plazo. Para los inversores, se trata de una inversión con una liquidez baja. Los ELTIFS podrían no ser adecuados para inversores incapaces de mantener un compromiso tan ilíquido y a largo plazo. Solamente debería invertirse una pequeña parte de una cartera en un ELTIF.
El valor de las inversiones fluctuará, lo cual provocará que el valor de las participaciones se reduzca o se incremente. Es posible que no recupere la cantidad invertida inicialmente. Las rentabilidades pasadas no son un indicativo de las rentabilidades futuras. Los puntos de vista expresados en este documento no deben considerarse como una recomendación, asesoramiento o previsión.