Fuente: M&G, a 23 de enero de 2025. Únicamente a efectos ilustrativos.
Por qué invertir en el M&G (Lux) Short Dated Corporate Bond Fund
Creemos que el M&G (Lux) Short Dated Corporate Bond Fund se diferencia de otros fondos por tres características principales:
- Gestión activa de crédito global: el fondo no está restringido únicamente a crédito con grado de inversión denominado en euros, ni está limitado por su índice de referencia en euros: los gestores pueden comprar bonos emitidos en cualquier moneda. Esto se traduce en más oportunidades en operaciones de valor relativo por divisas y regiones, y en acceso a empresas que no emiten deuda en euros. Estas pequeñas operaciones dirigidas a obtener mayores niveles de diferencial y de TIR pueden potenciar la rentabilidad de la cartera en el largo plazo.
- Exposición a tipos flotantes: los bonos flotantes son una posición fuera del índice que permite al gestor obtener exposición al crédito sin asumir riesgo de tipos de interés. Con cupones que suelen reajustarse cada trimestre, estos instrumentos tienen una duración casi cero. Esto significa que, en periodos de tipos de interés crecientes, se benefician de subidas de la tasa libre de riesgo subyacente, sobre la cual se paga una prima de riesgo de crédito. Esto ha contribuido a la rentabilidad en fases recientes con curvas de tipos planas e invertidas, aportándonos carry adicional en sus tramos iniciales.
- Titulizaciones de activos (ABS): el fondo aprovecha las amplias capacidades de M&G en el segmento de ABS, con un sólido y experimentado equipo que gestiona un patrimonio de 15.000 millones de euros. El fondo invierte en ABS con calificación AAA, que históricamente han proporcionado un diferencial similar al de la deuda corporativa BBB. Aunque esta relación ha mostrado cierta divergencia en los últimos dos años, los ABS todavía ofrecen un diferencial superior al del crédito tradicional AA. Se trata de instrumentos de calidad que hemos sometido a un análisis de crédito exhaustivo y que proporcionan renta adicional a la cartera.
Además, creemos que nuestras sólidas capacidades de análisis son otro factor que nos diferencia de nuestros homólogos. La pregunta clave que nos hacemos en todo momento a la hora de invertir es: «¿Se nos remunera adecuadamente por el hecho de asumir riesgo?». Una vez los analistas de crédito han evaluado los fundamentales de un bono corporativo, el equipo gestor determina si el precio al que cotiza es atractivo frente a dichos fundamentales.
Identificar bonos con precios anómalos es la piedra angular de nuestro enfoque basado en el valor, y creemos que ha sido la clave de la rentabilidad excedente del fondo en el largo plazo.
Qué hace el fondo, y cómo impulsamos la rentabilidad activa
El fondo trata de proporcionar una rentabilidad total (la combinación de renta y crecimiento del capital) superior a la del mercado de deuda corporativa con grado de inversión a corto plazo (medida por el índice Markit iBoxx EUR Corporates 1-3 Year) en cualquier periodo de cinco años, aplicando al mismo tiempo criterios medioambientales, sociales y de gobierno corporativo (ESG). Como mínimo un 80% de la cartera se invierte en bonos IG emitidos por compañías de todo el mundo y en titulizaciones de activos (ABS). Los bonos en cartera suelen ser emisiones que están a punto de llegar a su vencimiento. La asignación de activos y la selección de valores son dos pilares del proceso de inversión. El fondo invierte en valores que satisfacen sus criterios medioambientales, sociales y de gobierno corporativo (ESG), aplicando un enfoque de exclusión descrito en el folleto informativo. El periodo de tenencia recomendado en este fondo es de cinco años. En condiciones de mercado normales, su apalancamiento esperado (es decir, la medida en que puede ampliar su posición de inversión tomando dinero prestado o mediante instrumentos derivados) es del 150% de su valor liquidativo.
La gestión del fondo corre a cargo de Matt Russell (gestor principal) y Ben Lord (cogestor). La «sala de máquinas» es el equipo de analistas de crédito de M&G, uno de los más grandes y experimentados de Europa, respaldado por recursos adicionales en EE. UU. y Asia. Estamos convencidos de que la clave del éxito al invertir en crédito IG a corto plazo es la labor de análisis de crédito. Matt y Ben también están respaldados por los demás equipos gestores de renta fija, cuyos miembros especializados ofrecen sus mejores ideas en todo el espectro de clases de activos de deuda. El enfoque sencillo pero distintivo de la estrategia lleva largo tiempo generando niveles saludables de rentabilidad activa para los inversores.
En 2024 la rentabilidad fue plana respecto al índice de referencia, y pese a nuestro deseo de generar alfa todos los años, nos sentimos cómodos con esta excepción teniendo en cuenta las circunstancias. A lo largo de dicho año continuamos elevando la calidad crediticia y la liquidez de la cartera. Cuando los diferenciales de crédito se estrechan optamos por elevar la calidad, por ejemplo a través de cédulas hipotecarias o ABS con calificación AAA; cuando se ensanchan, elevamos el riesgo en la cartera.
Este es el enfoque de inversión que hemos implementado en los últimos 12 años, que ha funcionado bien en momentos como la fase previa a la pandemia de COVID y la invasión rusa de Ucrania. Si bien no anticipamos acontecimientos como estos, los entornos previos fueron bastante benignos y las valoraciones elevadas requirieron un enfoque con bajo riesgo de crédito. Así, al producirse sucesos inesperados de riesgo extremo, estábamos bien situados para añadir riesgo de crédito.
Las rentabilidades pasadas no son un idicativo de las rentabilidades futuras.